Hace tiempo que tenía ganas de compartir estas fotos con los que nos visitan, porque ellos son nuestros ositos blancos, que a medida que crecen nos hacen sentir orgullosos de lo bien que hacemos las cosas, con amor, responsabilidad y dedicacion. Además, en ellos se traduce la pasión que sentimos por esta raza, su inteligencia, picardía, astucia y belleza.
No paran de hacer travesuras, son intrépidos y curiosos y eso los lleva a correr algunos riesgo en el diario descubrimiento del pequeño mundo que los rodea.
Todos ellos aman el agua, dos de ellos ya debieron nadar por instinto, porque corriendo a un gato, cayeron dentro de la piscina de aguas profundas, en pleno invierno!. Pero como hacen honor a la raza, son muy fuertes, salieron ilesos, solo fue "un chapuzón en agua helada", y la inteligencia que tienen los orientó hacia las escaleras que nunca antes habían usado.
También ya se perfila en ellos la personalidad que tendrán de adultos, el machito, "Junior" tiene un carácter muy similar al de su papá, un poquito más dominante tal vez, protesta cuando alguna de sus hermanas se acuesta en su cucha, sólo está dispuesto a compartir con su mamá, a ella le permite todo.
Y la madre no tiene respiro con tantos traviesos dando vueltas, a los que también regaña cuando se pelean entre sí. Pero ella en el fondo también es una cachorra, porque lo que nuncan pierden los westies es su alegría y ganas de jugar. Pronto subiré algunas fotos de la hermanita que se fue a vivir a Panamá, donde disfruta de las playas y los cuidados de su mamá adoptiva que la ama y la lleva a surfear todos los fines de semana.
Hasta pronto, Laura.